El otro día con unos amigos y en una conversación muy interesante nos pusimos a compartir «best practices», como se diría en el mundo empresarial, o lo que es lo mismo: Buenas prácticas en nuestra vida cotidiana.
Fue muy interesante porque lo que salió no venía de las teorías, sino de la práctica vivida (que es la esencia de un mastermind, por ejemplo: un encuentro entre personas que aportan lo que han experimentado).
Así que hoy, aunque no estemos en un mastermind, te comparto algunos de los hábitos cotidianos que tengo (o sea, que están automatizados, me salen de un tirón) y que creo que son buenos para mí, para mi cuerpo, para mi atención y, por lo tanto, para mi desempeño.
Ahí van:
1. Bebo entre 2’5 y 3 litros de agua al día. Sabía que era importante, pero a raíz de una conversación con mi amigo Sergio Fernández me lo tomé en serio. Luego me enteré de que el factor n.º 2 del cansancio/agotamiento es la deshidratación.
Y después supe a través de diversos especialistas en la materia que por nuestro estilo de vida hemos acabado no dándonos cuenta de que nos falta agua en el cuerpo (o sea, que eso de que no tengo sed no vale).
Y como sé que es fácil de olvidar esto de beber cotidianamente lo que me toca (tengo otras muchas otras chorradas en la cabeza), llevo siempre conmigo una botella de medio litro, en el coche tengo otra de cristal, en el dormitorio otra, en la mesa del despacho otra (con agua por supuesto, aunque al principio se me olvidaba llenarlas, y allí estaban, reflejo de mi falta de compromiso con la causa).
Y también hay aplicaciones para el móvil donde te facilita que monitorices lo que bebes (y eso supone estar pendiente).
Antes de acostarme siempre bebo un vaso de agua, y también según me levanto justo cuando acabo de posar los pies en el suelo.
Y creo que me va bien.
2. Tengo desactivadas las notificaciones del móvil. Y de prácticamente todos los lados. Hoy vivimos una carencia de capacidad de poner en foco algo durante más de unos minutos, y nuestra gente joven más. De hecho, es con lo que se comercia y se gana dinero hoy con las redes sociales y similares: con nuestra atención. Si todo el mundo desactivara las notificaciones, algo tan simple y sencillo, pasarían cosas muy buenas.
Así que cuando algo es importante para mí, voy y lo miro, no estoy pendiente del sonidillo, vibración o alerta visual de una notificación. Y si alguna vez me he perdido algo, que pasar ha pasado, me sigue compensando con todo lo positivo que obtengo: estar aquí y ahora.
3. No uso el ascensor, siempre las escaleras. Fue a raíz de una entrevista que le hicieron al golfista Gary Player, que tenía ya muchísimos años, pero estaba el tío como una rosa. Y me suele interesar la gente que desde el ejemplo tiene cosas que a mí me vendrían bien.
Y decía Gary (voy a tutearle, jaja) que él jamás tomaba el ascensor, que siempre por las escaleras, que era un ejercicio maravilloso para el cuerpo, para el corazón, piernas… Y me dije: Pues tiene sentido, y además no es difícil de hacer, ni hay que buscar escenarios complejos precisamente. Se va a dar tarde o temprano sí o sí. Y se me ha quedado instalado. (Vamos a ver, si tengo que subir con 4 bolsas de compra y una maleta, uso el ascensor, no soy un talibán, pero muy gorda tiene que ser la cosa para que no suba por la escalera).
Este hábito tiene también sus sorpresas… En un viaje a casa de mi amigo Antonio G al llegar, descubrí con un “Oh My God” que vivía en un octavo… Pues nada, no sé cuantas veces subí y bajé, pero seguro que fue sano para mí. (Y no te digo como uno se anticipa a escenarios y está presente, para que no suceda eso de: “ay, me he dejado el teléfono en el coche 😊”).
Pues ahí te lo dejo. Por si te vale como me valió a mí.
Te mando un abrazo grande y ¡Buen Camino!
Josepe
PD: al final la vida es una cuestión de automatizar aquello que elegimos y que es bueno para nosotros, de tomar decisiones conscientes y sobre todo, mantenerlas después.
Si quieres trabajar esto conmigo en 1 a 1, te paso este enlace para que veas como lo hago:
Y si quieres tener un manual experiencial para dar un salto cuántico en tu comunicación en público y luego sostener ese salto, en junio tendremos Top Speaker and Trainer (para personas ya con tablas en el tema).
Te paso el enlace con la info:
¿QUIÉN HA ESCRITO ESTE POST?
Josepe García. Es una de las primeras autoridades en España para emprendedores y profesionales del desarrollo de las personas que quieren emprender con éxito, además de uno de los pioneros del coaching en España e introductor de la formación de alto impacto en nuestro país. Director del Instituto Impact, de la Escuela de Oratoria para Empresarios y Creador de programas como «Top Speaker and Trainer» o “Vivir del Coaching”, ha tenido como alumnos u oyentes a más de 40.000 personas en EEUU, México, Panamá, Colombia, Perú, Chile, Francia y España; ha entrenado a más de 800 coaches, formadores, terapeutas, muchos de los cuales hoy son auténticas referencias. Con más de 2000 sesiones de coachings a sus espaldas, ha hecho crecer su empresa un 400% en los últimos 4 años. Es colaborador asiduo de la revista “Emprendedores”, empresario desde los 23 años, es coach profesional de ASESCO, miembro de ICF y AECOP, Coactive Coach por CTI, especialista en Inteligencia Emocional por la UCJC, trainer en PNL por el IPH y Master en Comunicación No Verbal con Joaquina Fernández. Es autor de la novela Best Seller sobre el Camino de Santiago ya en su 11ª Edición “Buen Camino”, o “PNL para líderes”.