Por supuesto, no todos los sectores o modelos de negocio obtienen los mismos resultados, pero cuando Procter & Gamble, uno de los consorcios con mayor presupuesto destinado a publicidad, está apostando por este cambio, por algo será. Mirando hacia el futuro Bernd Kracke, presidente de la Asociación Alemana de Marketing Directo (DDV), también ha observado esta ola de personalización. De hecho, en Alemania empresas como Otto, Deutsche Bank o Deutsche Telekom ya utilizan hoy esta herramienta.
Por medio del marketing one-to-one la empresa se convierte en consultora. Aún más, en «cuidadora» de sus clientes. Una buena opción es crear páginas web personalizadas en las que aparezca reflejada la evolución del cliente y utilizar este historial para dirigirle acciones. Por ejemplo, llegado el momento de comprarse un nuevo coche, éste recibiría en su buzón la oferta de su marca preferida junto a un modelo de financiación.
La publicidad y el marketing sirven cada vez más para que las empresas influyan de forma más efectiva en sus clientes. O al revés: la start-up Vocatus.de recoge en un banco de datos reclamaciones de clientes que vende posteriormente a las empresas afectadas, quienes las utilizan para mejorar sus productos y corregir errores.